domingo, 22 de octubre de 2017

Liencres, se amplia el paraiso



El gobierno autónomo ha ampliado el Parque Natural de las Dunas de Liencres, uno de los más importantes del norte de España

 El patronato del Parque Natural de Liencres ha publicado el PORN (Plan de Ordenación de Recursos Naturales) en el que se amplía el área de protección del parque en 1200 hectáreas, pasando a ocupar los municipios de Miengo, Piélagos, y Santa Cruz de Bezana. Sus límites corresponden desde los acantilados de los Caballos y las Islas Conejeras (Cuchía), en el oeste, hasta la playa de San Juan de la Canal (Soto de la Marina), en el este; hacia el interior, se extiende por el estuario del Pas hasta la línea del ferrocarril de FEVE.

Todo comenzó el día 9 de Diciembre de 1986, cuando el Gobierno de Cantabria decidió proteger el sistema dunar de la playa de Valdearenas. Tras esto, la evolución y ampliación del parque no ha cesado, entrando a formar parte del programa Red Natura 2000 en 1992, y ampliando su extensión en 2004. La protección no solo se centra en el valor geológico y paisajístico que tiene el complejo dunar, sino que, también se protege la fauna y flora que habita en el estuario del Pas.




Parque dunar de Liencres junto a la playa de Valdearenas / L. CRIADO (ENREDADOS)


La singularidad de esta zona viene dada por la formación de las dunas y el proceso de sedimentación y asentamiento de estas, proceso iniciado en el jurásico marino con la acumulación de material calizo en la zona. Con el paso del tiempo se fue formando el sistema dunar hasta llegar al día de hoy, con una gran extensión de dunas situadas al sur de la playa de Valdearenas, constituido por depósitos de arena fina muy inestables, que transforman el paisaje litoral constantemente.

Un paraíso natural que abarca alguna de las zonas más espectaculares de la costa cantábrica, cuya labor de conservación ha conseguido preservarlo casi virgen manteniendo la especulación inmobiliaria a raya, a excepción de los núcleos urbanos de Liencres y Mogro. El paisaje, que deja sin aliento, es un reclamo para el turismo, ya sea por la extensa playa de Valdearenas o las recónditas calas de Usgo o Canallave. La fauna que se encuentra en el estuario del Pas y en el interior de las dunas, junto con la vegetación propia de la zona, forman un ecosistema incomparable en la costa de nuestra comunidad.

Una joya en el corazón de Cantabria que, ahora, se amplía para conseguir una mayor protección e implicación con el cuidado del singular paisaje de esta zona de la costa, convirtiéndolo en un auténtico tesoro en el que se puede disfrutar de la belleza de la naturaleza costera de una forma única.






S. GARCÍA / J.A. ABARCA

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